RISOTERAPIA PARA PADRES
Nuestro amigo, José Luis, también nos ha mandado un regalito por las 100.000 visitas, y como no podía ser de otra manera, lo ha mandado en forma de risas y más risas.
Así que ahí va:
SONRIE
La capacidad de sonreír constituye una
de las diferencias fisiológicas que existen entre el hombre y los
animales. Podemos encontrar diferentes estudios que han demostrado
que la sonrisa es una reacción involuntaria a determinados estímulos
y que se produce sin importar la cultura, la raza ni la edad.
Tampoco
es una reacción que uno aprenda, sino que nacemos con ella, ya que
los niños a los pocos días de su nacimiento ya ofrecen sus primeras
sonrisas.
La sonrisa no sólo cambia la expresión
de la cara, sino que, por el simple hecho de producirse, hace que el
cerebro reciba una señal indicadora que pondrá en marcha mecanismos
para que produzca endorfinas, unas hormonas que son segregadas por
diferentes partes del organismo y que tienen la función de reducir
el dolor físico y emocional y de darnos una sensación de bienestar.
Se ha dicho que la sonrisa es la luz de
nuestro corazón, lo que genera aptitudes positivas, la que abre
muchas puertas y nos facilita el camino para llegar a los demás.
Incluso reduce el enfado entre las personas, distiende las
discusiones y merma el efecto de algún error o equivocación que
hayamos cometido.
EJERCICIOS DE RISOTERAPIA
Decidme una cosa. ¿Quién no se ha
parado frente a un espejo y ha ensayado una mueca? Es el lugar ideal
para desarrollar la risa en la intimidad (los risoterapeutas nos
valemos de ellos para practicar y reírnos muchísimo con nosotros
mismos, es genial).
Nos ponemos delante de un espejo, por ejemplo el del baño. Es el primero que
podemos utilizar para ensayar, cuando nos levantamos por la mañana
es un buen momento para vernos con cara de sueño.
¿Qué tal se te da la inspección
dental? Es un momento propicio para hacer algunas muecas, con la
lengua fuera. Las cremas faciales o la espuma de afeitar dan mucho
juego. Barbas blancas para señora, caballero y niños, patillas,
bigotes, morritos, y alguna que otra pintura de guerra pueden
animarte la sesión de retoque facial. ¿Y con el secador? Puedes
jugar a los peinados de la señorita Pepis o el señor Potato.
La inspección de cuerpo entero puede
resultar de lo más divertida,( practicadlo en familia, delante de un
espejo, en la habitación, y todos juntos, es destornillante,
probadlo, ). El turno de pectorales,
senos y catetos, incluyen miradas de frente y perfil. Las barriguitas
dan mucho de si, el gesto de mostrarla en todo su esplendor y en
apenas un segundo esconderla es un buen ejercicio de abdominales. Si
consigues reírte en ese momento, verás cómo lo haces sin esfuerzo,
ampliando y reduciendo la cintura en al menos diez centímetros.
Una vez vestidos podemos reaparecer en
escena para ver los milagros del prêt -a-porter y comparar,
echarles unos piropos atrevidos a la persona que te mira, te los
devolverá al instante con una sonrisa radiante.
Preparados, listos…. A la calle, que
se hace tarde. Por el camino, encontraremos multitud de espejos que
nos esperan para practicar (retrovisores, cristales, escaparates,
etc)., reflejarán nuestra imagen a poco que nos acerquemos para
seguir practicando muecas, guiños, besitos, poses etc. Y si alguien
nos observa no lo dudes: envíale tu mejor sonrisa, que a buen seguro
te la devolverá.
Durante el trabajo, una visita de vez
en cuando al baño, nos dará la oportunidad de saludarnos y hacernos
unos guiños llenos de complicidad.
Practicando varias veces por semana,
conseguiremos implantar el buen humor en nuestra vida, lograremos
brillar desde el primer momento del día, desearemos vernos
reflejados y poder comunicarnos con nuestra imagen, conseguiremos
gustarnos como nunca lo habíamos hecho antes, conseguiremos tomarnos
menos en serio, y lo que es más importante, reírnos sin ningún
tipo de problema.
Aunque esta colaboración está
centrada en recuperar la sonrisa de l@s papis; practiquemos algún
juego con los peques de nuestra casa, nos lo agradecerán mucho el día
de mañana, y también estaremos derribando tabús, barreras, sobre
nuestro cuerpo y ese culto tan exagerado, que tienen las sociedades
de hoy en día al cuerpo perfecto.
Gracias por vuestra atención, y hasta
prontito.
José Luis Alves Montesinos (Líder de Yoga de la Risa - Risoterapeuta).
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